Somos más que una cafetería
Somos un lugar donde el café importa y cada visita tiene su ritmo.
En La Dulce Parada, todo el mundo encuentra su momento, el que viene a trabajar tranquilo, el que desayuna sin mirar el reloj o el estudiante que pasa volando en el descanso a recoger su bocadillo ya listo.
Aquí puedes venir con tu perro, con tu ordenador, con hambre a media mañana, descubrir arte local y disfrutar de un café recién molido que sabe a pausa, aunque sólo te quedes un minuto.
Somos La Dulce Parada.
Un rincón en Ávila donde parar, saborear y seguir con ganas de volver. Una parada breve o larga pero siempre dulce.

